martes, 28 de enero de 2014

LAS IMPORTANCIA DE LAS NORMAS

La primera pauta que recomiendo a los padres cuando hablamos de mal comportamiento en el hogar suele ser que el niño tenga unas normas. Parece sencillo, pero ahí suelen comenzar los problemas… y la solución.
Efectivamente el niño debe disponer de unas normas para poder educarlo y para ayudarle a controlar su comportamiento. Estas son algunas de las características que deben cumplir las norma


  • Deben ser muy sencillas y concretas, es decir expresar claramente qué tiene que hacer el niño. Normas del tipo: “sé bueno”, “pórtate bien” cumplen estas características.
  • Las normas deben estar adaptadas a la edad del niño y a su capacidad. Por tanto, ser realistas a la hora de proponerle las normas.
  • Suelen estar referidas a cómo tratar a las personas significativas (padres, hermanos, amigos), respetar horarios (hora de comer, de jugar, de estudiar, de dormir…), referido a objetos (mobiliario de casa, propias pertenecias…)
  • Debe haber acuerdo entre la pareja respecto a las normas que se le proponen al niño y su exigencia.
  • Hay que ser constantes en su aplicación y exigencia: muchos niños al principio, intentan incumplirlas.
  • Es necesario ser coherentes en su aplicación. Si decimos que el niño recoge sus juguetes… debe ser el niño el que los recoja, no papá o mamá.
  • Las normas se deben razonar con el niño, explicarles su por qué y beneficios.
  • Las normas deben proponérselas al niño más como un privilegio que como una imposición. Razonamientos del tipo, “como ya vas siendo mayor, tienes que recoger tu ropa sucia y echarla en el cesto”, son más efectivos que simplemente imponerle la norma
Jesús Jarque García para el Portal Educativo Educapeques